MANCHAS DE CAFÉ Y DE LECHE
Échese sobre estas manchas una pequeña cantidad de glicerina y lávense después con agua clara hasta que desaparezcan. Luego se extiende la tela sobre una mesa para que se seque. La glicerina no altera los colores por más delicados que sean.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario