FÓRMULAS PARA QUITAR MANCHAS


MANCHAS DE VINO Y DE FRUTA.

Uno de los medios más fáciles y ràpidos que se conocen para quitar estas manchas, consiste en empaparlas bien en agua de Babel, o sea con clorato de potasio líquido y lavarlas enseguida con agua fría.
MANCHAS DE CAFÉ Y CHOCOLATE.

Para quitar estas manchas sin destruir el tinte de las telas, lávense con yema de huevo mezclada con agua caliente. Si no desaparecieren por completo, hay que frotarlas con un pincel mojado en alcohol.
MANCHAS DE CAFÉ Y DE LECHE

Échese sobre estas manchas una pequeña cantidad de glicerina y lávense después con agua clara hasta que desaparezcan. Luego se extiende la tela sobre una mesa para que se seque. La glicerina no altera los colores por más delicados que sean.
MANCHAS DE FRUTAS ÁCIDAS SOBRE TELA BLANCA O DE COLOR

Para quitar las manchas de limón, naranja, groselias, cerezas, fresas etc., en tejidos blancos, basta, generalmente, lavarlas con agua y jabón. Mas, para quitar estas mismas manchas en las telas o ropa de color, es necesario echar diez o doce gotas de ácido sulfúrico en un vaso de agua; luego se mojan las manchas con dicha agua y seguidamente se lavan con jabón corriente y agua abundante.
MANCHAS DE AZUCAR, GELATINA, SANGRE Y ALBÚMINA

Estas manchas se quitan fácilmente lavándolas con agua que contenga una pequeña cantidad de bicarbonato de sosa.
MANCHAS DE ACEITE Y DE GRASA SOBRE EL PAPEL

Se toman huesos de carnero quemados y reducidos a polvo; frota la mancha con dos o tres dobles de papel con este polvo; se meta en la prensa y, sobre el papel manchado se ponen tres o cuatro papeles más, dejándolos en este estado durante una noche entera. Este polvo de hueso quemados absorbe el aceite y destruye la mancha.
Si la primera tentativa no diese el resultado apetecido, debe repetirse la operación y la mancha desaparecerá.
MANCHAS DE PETRÓLEO SOBRE EL PAPEL

Basta acercar el papel manchado a un fuego lento, y el petróleo se volatiliza sin dejar señal alguna, por grande que fuese la mancha. Sólo hay que tener mucho cuidado con la distancia entre el papel y el fuego, no sea que por quitar la mancha se tueste el papel.
MANCHA DE GRASA EN LOS VESTIDOS.

Extiéndase la tela manchada sobre una mesa y échese sobre la mancha algunas gotas de alcohol rectificado; cúbrase con un paño de hilo bien fino y pásese por encima una plancha caliente; cámbiese el paño y repítase la operación hasta que toda la grasa haya pasado al paño de hilo.
MANCHAS DE GRASA DE CARRO Y ALQUITRÁN.

Estas manchas tan difíciles de quitar, desaparecen muy pronto limpiándolas con esencia de trementina y jabón.
MANCHAS DE CERA Y BUJÍAS.

Estas manchas se quitan fácilmente lavándolas con un poco de alcohol de 36 grados.
MANCHA DE CERA EN EL TERCIOPELO.

Se extiende el terciopelo sobre una mesa, se cubre la mancha de cera con un trapo mojado y se pasa, sin apoyarla, una plancha caliente.
MANCHAS DE PINTURA.

Estas manchas se quitan con mucha facilidad; basta con frotarla con esencia de trementina y lavarlas con jabón.
MANCHAS DE NITRATO DE PLATA.

Estas manchas tan difíciles de quitar, desaparecen humedeciéndolas con agua fría, frotándolas después con yoduro de potasio y por último una disolución de hiposulfito de sosa al 50 %.
MANCHAS DE CAL, SOSA Y LEJÍAS.

Estas manchas desaparecen fácilmente lavándolas con agua mezclada con un poco de ácido cítrico.
TODA CLASE DE MANCHA EN TELA DE SEDA.

He aquí la fórmula: Alcohol, un litro; agua de rosas, 15 gramos; carbonata de potasa, 60 gramos; jabón blanco, 500 gramos.
Se raspa el jabón y se pone en el alcohol; al cabo de unos días se le añade el carbonato disuelto en agua de rosas. Se filtra todo y se echa en un frasco.
Para usarlo, basta empapar un poco de algodón en el líquido y frotar con él la mancha, hasta que desaparezca. Para quitar el olor de la esencia, se aclara la tela con agua caliente.
QUITAR MANCHA DE ORIN EN LA ROPA BLANCA

Para quitar estas manchas, muchos emplean el ácido oxálico y también el bioxalato de potasa, procedimiento que no se recomienda en primer lugar por tratarse de sustancia venenosa y, además, porque estropean la ropa. El medio que aconsejamos, hasta para la ropa de color, consiste en aplicar sobre la mancha cierta cantidad de crémor tártaro, en polvo fino, y mojarlo después con agua clara.
OTRA FÓRMULA PARA QUITAR LA MANCHA DE ORÍN.

En un vaso de agua se echan 15 gotas de ácido sulfúrico, y se moja la mancha con esta mezcla; se deja reposar por un rato y, antes de que se seque, se moja nuevamente con agua en la que se le ha disuelto previamente una pequeña cantidad de prusiato amarillo de potasa.
La mancha roja de orín toma un tono azulado, el cual desaparece completamente en la colada.
MANCHAS DE TINTA SOBRE TELAS Y TEJIDOS.

Aplíquese sobre la mancha una disolución de sal de acedera y frótese con un paño. Si la mancha es antigua pueda que no desaparezca del tod; entonces debe emplearse la disolución de cloruro de estaño.
MANCHAS DE TINTAS SOBRE BLONDAS O ENCAJES.

Se va echando gota a gota ácido cítrico sobre la mancha y se le pasa una plancha caliente por encima. La mancha desaparecerá al momento, sea hecha sobre lienzo o sobre encaje.
MANCHA DE TINTA SOBRE LIENZO FINO.

Se toma una vela de sebo, se le hace fundir y se mete la mancha en el sebo fundido; al día siguiente se lava con agua y jabón y la mancha desaparece sin riesgo de que jamás se haga agujero en el sitio donde estuvo manchado.
MANCHA DE TINTA SOBRE MADERA.

Cuando las manchas son recientes, basta frotarlas con una solución de ácido oxálico; si son antiguas, hay que empaparlas bien con agua caliente y luego, con un paño, se frotarán con un poco de bioxalato de potasa; a continuación se añadirá una pequeña cantidad de cloruro de estaño, previamente disuelto y se seguirá frotando la mancha hasta que desaparezca del todo.
MANCHAS DE TINTA SOBRE PAPEL.

Si se está en tiempo de que haya agraz, se tomará algunos granos y se frotarán sobre la mancha, mezclando un poco de agua. Si la mancha es fresca, desaparecerá fácilmente.
OTRO SECRETO PARA QUITAR MANCHA DE TINTA SOBRE PAPEL.

Se toma agua clara en la cual se hace disolver muriato de sosa en igual cantidad de agua y se frota fuertemente la mancha.
QUITAR LAS MANCHAS DE LOS GRABADOS IMPRESOS Y DARLES SU PRIMITIVA BLANCURA.

He aquí un procedimiento de gran utilidad para los bibliófilos, anticuarios y cuantos sienten amor por las bellas estampas.
Para destruir las manchas producidas por la tinta usual, el robín o herrumbre, la humedad y el polvo y dar al papel su primitiva blancura, hay que hacer lo siguiente:
Se extiende la hoja que se ha de limpiar sobre una plancha o una mesa bien lisa, que antes se habrá cubierto con una servilleta, sin dobleces o muy poco marcados, o bien con papel de estraza. Se humedece suavemente lo manchado con una esponja fina mojada en el agua y cuando se note que la hoja ha tomado una extensión igual, se pasa por encima un pincel humedecido con agua de sarmiento, hasta que la mancha tome un tono amarillento; se vuelve a pasar una o dos veces más el pincel; luego, con una esponja seca, fina, se quitará la humedad; por último se vuelve a humedecer en una disolución de oxalato de potasa (20 gramos en medio litro de agua), sobre la mancha amarilla. Al cabo de media hora la mancha desaparece y el papel toma una limpidez sorprendente.
Para completar la obra, se cubrirá la estampa o grabado con algunas hojas de papel de estraza, a fin de chupar la humedad del agua y, antes de estar completamente seca la hoja, se la planchará para que tome toda su tersitud.